lunes, enero 15, 2007

Breve resumen de mi vida cotidiana. Análisis de la problemática del día: Mi multiplicidad existencial

Vengo del gimnasio, que rico, me han reventado los brazos.

Mañana toca piernitas (ya no podré caminar jaja); es interesante al fin me gusta esto de los ejercicios, nosé ese extraño dolor me causa placer, el dolor me emociona, que rico, es sentir la carne tan dura y adolorida, yo nosé mas de mazoquismo que ciertas cosas, claro no soy un master de la materia, ni tampoco soy alguien que le gusta que le golpeen. Pero es creo el dolor lo que me aumenta las ganas de seguir, o sea, es como si cerebro segregase algún líquido que me dan ganas de seguir, sentir mas fuerte el dolor, mas adolorido, mayor progreso, algo así lo siento.

Las cosas siempre me salen mal. A veces siento acostumbrarme, las percato pero ya no me producen la sensación de dolor y fatiga emocional; sencillamente ocurren, las veo y me dan ganas de cagarme de reírme como un loco, cosa que suelo hacer a menudo.

Me he dado cuenta que hacer gimnasio me quita las ganas de masturbarme, en parte me parece bien; en otra? uhmm...también, nosé, porque lo quize decir así.
¿Será que algo guarda mi subconsciente?.

Aún sigo pensando en la flaquita esa con la que salí el sábado. Su curvilínea figura me tiene atormentando la superficie de mi cerebro, y su rostro tan juvenil y delicado me exita, tanto como tenerla y poseerla, noooooooooooo poseerla que dije....noooo no hay nada más horrible que poseer a una persona, como si fuera tu propiedad, como si fuera tu dominio, ptmr que asco, pensar que una vez en mi vida, en el pasado, yo poseí a alguien.

Al final tanto poseedor como poseído son dependientes de uno y del otro; uno sirviendo y el otro cuidando a su fiel siervo de las garras de los rapazes lobos.

Que feo. Lo dije sabes porque?, porque creo yo que, muy interiormente mío, me gusta poseer, y es verdad creo que a todos, pero lo negamos, yo lo negaba pero no podía contenerme, sentir dominio, tomar, medir, limitar, deslimitar, soltar, retomar.

Sentimentalmente midiendo lo que se daba y probando que tanto daba ella. En la cama, tomandola con fuerza, dandole con ganas, a veces suave, a veces salvajemente, ordenandole, como sentarse sobre mí, como moverse, castigandola, suave a veces ferozmente, me gustaba sentirla mi propiedad, recuerdo que mientras la follaba le pedía que gimiese mas fuerte, o que me grite lo dura que la tenìa y muchas cosas más, a ella le llego a gustar mis castigos y se mojaba aún más cuando lo hacia.

La tomaba del cuello y la empezaba a ahogar mientras la penetraba, o la jalaba del pelo mientras ella me producía una excelente felación, o cuando la tenía de cuatro. Y otras cosas más.

Waaaa, tantas cosas hize; me descontrolaba, no era yo; yo sería incapaz de pegar a una mujer, nunca lo haría, nunca lo he hecho, ni siquiera me controle porque es algo tácito en mí, cuando algo malo me solían hacer. Es más nisiquiera me he peleado con otro hombre; bueno sí de boca y muchas veces con ladrones me he dado de trompadas para que no me roben (donde vivo tienes que aprender a enfrentartelos sino te toman de huevón) , pero con otra persona por alguna joda nunca. Soy demasiado tranquilo.

No quiero que eso llege a pasar otra vez, no ya no, es mi propio pasado oscuro que me persigue. Ese lado mío que sé no podre cambiar. Pero que está allí. Tengo muchas caras, muchas personalidades. Quizás está sea la más sincera.

Ella no se merece una persona tan destructiva consigo misma. De múltiples personalidades. Alguien sincero. Sí, ella debe tener a alguien sincero.

Sabes?, deseo cambiar; pero sé que no podré, porque nací con esta forma de ser. Pero, al menos dejame aprender a controlarlas. Saber cuando actuar así y cuando no.

Dije!.